La presentación del cuadro macroeconómico y el techo de gasto del gobierno de Sánchez debería hacer saltar todas las alarmas a cualquier persona responsable. Es una combinación de estimaciones exageradamente optimistas y brindis al sol que, encima, dejan al país al borde de la ruina.
Nos sitúa, además, con la mayor tasa de paro de la Unión Europea tras consumir la mayor inyección de ayudas fiscales y monetarias europeas de la historia, y deja al país al borde del abismo incluso usando las cifras gubernamentales.
El gobierno prevé una recuperación del PIB para 2021 del 6,5% y del 7% para 2022. Ambas cifras están en la parte alta de las expectativas del consenso de mercado, pero oculta que el los analistas estiman un aumento del PIB de España para el período 2019-2023 de solo 96.000 millones de euros.
El gobierno prevé una recuperación del PIB para 2021 del 6,5% y del 7% para 2022
Una cifra que contrasta con el aumento de deuda de 350.000 millones de euros y el aumento de la tasa de paro de +0,5% al 14,6%. De hecho, el gobierno oculta que en sus propias previsiones la deuda de España superará el 130% del PIB en 2022 (ya es del 125%).
El gobierno, además, vuelve a jugar con el deflactor del PIB. A pesar de que la inflación sube en sus previsiones, el deflactor del PIB lo mantienen favorable a las estimaciones del gobierno para dar una imagen de recuperación mucho más robusta de la previsible.
Para el gobierno el gasto público es inamovible y, además de consolidar gran parte de la cifra de 2020 utilizando la excepcionalidad del Covid-19 para hacer que el gasto excepcional sea estructural, aumenta la cifra de 2021 en otros 45 millones de euros hasta llegar a los 196.142 millones en 2022. Un récord de gasto que hace insostenible la situación de las cuentas públicas.
Lo más vergonzoso es que el gobierno muestre un aumento del déficit público sin precedentes como una reducción. El déficit de 2019 ya lo elevaron al 2,8% y en 2022, con un crecimiento aparentemente espectacular y decenas de miles de millones de euros de los fondos europeos consumidos, lo dejarán -en sus estimaciones- en el 5%.
El déficit de 2018 era del 2,4% y Sánchez lo va a dejar, incluso con sus estimaciones de ciencia ficción, en más del doble.
El gobierno oculta que en sus propias previsiones la deuda de España superará el 130% del PIB en 2022
Sánchez dejará la legislatura con el doble de déficit que dejó Rajoyy dilapidando el mayor apoyo financiero y monetario recibido por España en la historia.
El BCE ha comprado más del 100% de las emisiones netas de deuda de España y acapara alrededor del 30% de toda la deuda públicaespañola en circulación, más de 390.000 millones de euros.
Sánchez endeudará a España en más de 350.000 millones de euros y dilapidará la mayor inyección de fondos europeos y apoyo del BCE de la historia para dejar a España con un déficit estructural del 5,2%, un endeudamiento récord y más tasa de paro que en 2019.
Estas previsiones, además, son muy optimistas. Asumen que las enormes subidas de impuestos que anuncian no van a tener ningún impactoy que el crecimiento de 2021 se va a fortalecer aún más en 2022, algo mucho más que dudoso.
Las previsiones son muy optimistas pues asumen que las subidas de impuestos no van a tener ningún impacto
Adicionalmente, la tasa de paro que estima el propio Ejecutivo se mantiene en niveles muy altos: 15,2% en 2021 y 14,2% en 2022, pero el consenso recopilado por Focus Economics la eleva al 14,6% o 15% en 2022.
El gobierno se vanagloria de que «en tres años de Gobierno de Pedro Sánchez, la Oferta de Empleo Público ha sido un 73% superior a los seis ejercicios de Mariano Rajoy» y dice que «apuesta por el empleo».
En junio de 2021 los niveles de paro siguen por encima de los de 2017 y un 20% por encima de 2019, y eso sin contar los ERTE y autónomos en cese de actividad. El gobierno dice que apuesta por el empleo, pero sube los impuestos a la contratación con más de 820.000 personas sin trabajo desde niveles prepandemia.
El gobierno más caro de la historia y el de mayor déficit estructural de Europa se lanza a una campaña de contratación pública innecesaria e irresponsable para disfrazar las malas cifras de paro poniendo en peligro todas las cuentas y trabajos públicos. Luego hablarán de «recortes».
Sánchez no solo dejará al país al borde de la quiebra, sino a la Seguridad Social al borde del colapso, con una transferencia vía deuda por importe de 18.396 millones de euros en 2022, un 32,1% de incremento sobre la transferencia de 2021. Más de 32.000 millones de euros de agujero de la Seguridad Social cubiertos con deuda en dos años (2021 y 2022).
Poniendo escollos al crecimiento y el empleo y desbocando el gasto político y el exceso burocrático es como se pone en peligro el sistema de pensiones y la Seguridad Social.
El gobierno más caro de la historia y el de mayor déficit estructural de Europa se lanza a una campaña de contratación pública innecesaria
Los ciudadanos deben saber que el exceso de gasto y hacer las cuentas públicas insostenibles hoy siempre – ¡siempre! – lleva a muchos más recortes en el futuro.
No existe medida alguna de ingresos que sostenga un déficit estructural de más de 50.000 millones anuales.
El gobierno dice que en esta crisis la respuesta ha sido diferente, y es falso. Está haciendo lo mismo que el gobierno hizo en 2008 y lo mismo que hizo Grecia, pero más agresivamente: Gastar sin control, endeudarse y pensar que todo lo va a pagar el contribuyente europeo.
Hacer insostenibles las cuentas públicas disparando el gasto político y el déficit estructural y, además, expoliando a impuestos a los contribuyentes no es una política social. Es antisocial.
En todos los municipios y comunidades gobernadas por políticos y partidos liberales no exista ningún caso de corrupción para que los ciudadanos vuelvan a votarlos y así tratar de conseguir un gobierno fuerte como en la comunidad de Madrid y tengan confianza en la creación de empleo y reducir el gasto de deuda publica
Buen apunte, aunque a los liberticidas les da igual la corrupción cuando es de los gobiernos socialistas. No es el qué sino el quién lo que les motiva.
Aumenta de manera constante el endeudamiento y el BCE dejará de comprarmos deuda a partir de 2023, lo cual ya presenta un futuro aterrador. Pero además el dinero se despilfarra a manos llenas en cosas cosas superfluas, meras pantallas mediáticas: no se incentiva nuestra economía, se desanima a quienes pudieran ser sus motores para sacarla a flote. Desalentador panorama.
Muchas gracias, profesor Lacalle, por estar ahí y dar la cara.
Después de leer la noticia de su intervención en un programa de televisión ¿le merece la pena tener que aguantar a energúmenos ignorantes cuyos únicos argumentos son las consignas? Son gente que no recapacita ni ante la evidencia más elemental. Salvo honrosas excepciones, ese es el tono general de los paniaguados (2ª acepción del diccionario de la RAE) del pesebre.
Si no lo hacemos, el mensaje falaz que ellos venden es el único que ven los ciudadanos. Gracias