«We’re afraid of everyone, afraid of the sun, isolation». John Lennon.
Las propuestas de la Unión Europea y Estados Unidos para implementar un embargo energético completo a Rusia deben tener en cuenta la realidad. Sin China e India no existe embargo real posible.
Eso no significa que las sanciones no funcionen. Todo lo contrario. Aunque el régimen de Putin dice que el rublo se ha recuperado, la realidad es que desde el desplome se han implementado severos controles de capitales y ningún ciudadano o negocio ruso puede vender rublos a cambio de dólares, euros, yenes o libras y mucho menos a ese tipo de cambio oficial que aparece en los titulares. En los chats de redes sociales donde se ha creado el mercado paralelo de rublos el tipo de cambio es hasta un 70% inferior a lo que refleja el dato oficial.
Las estimaciones de caída del PIB de Rusia se mueven entre un 11 y 15% en 2022 y la inflación es cercana al 200%, según JP Morgan, Quartz y Business Insider.
Otra prueba de que las sanciones funcionan es que los países asiáticos están comprando la producción de Rusia con enormes descuentos, algo inhabitual en un entorno de precios y demanda elevados como el actual. Platt’s informa de descuentos de hasta el 20%.
La Unión Europea, Reino Unido y EEUU no pueden caer en el error de pensar que pueden cargar con el 100% del embargo energético cuando China está disparando sus importaciones de Rusia.
La vía de escape de las sanciones es China que mantiene una posición neutral y, aunque eso no evita el colapso económico de Rusia, la colaboración de China es clave para que exista un embargo que realmente acabe con la invasión.
La vía de escape de las sanciones es China que mantiene una posición neutra
En 2022, se estima que las exportaciones de Rusia a China y los países asiáticos y emergentes que mantienen el comercio con el régimen ruso superen los 170.000 millones de dólares, significativamente más que la cifra de exportaciones a la Unión Europea de 2021, 158.000 millones de dólares. A China se espera que Rusia exporte unos 103.000 millones de dólares, muy por encima de la cifra de 79.000 millones de dólares de 2021.
La evidencia es clara. Sin China no hay embargo energético real.
China representa el 15,4% de las exportaciones totales de petróleo crudo de Rusia, y solo Arabia Saudí le vende más. Hablamos de 1,6 millones de barriles por día el año pasado que se espera que lleguen a tres millones de barriles diarios en 2022.
En cuanto a carbón, Rusia es el segundo mayor suministrador de carbón a China en 2021, unos 57 millones de toneladas el año pasado o el 17,6% de sus importaciones totales de carbón.
Rusia es también el tercer mayor suministrador de gas de China. El país asiático representó el 6,7% de las exportaciones rusas de gas natural en 2021, 16.500 millones de metros cúbicos (bcm), el equivalente al 5% de la demanda de China. Todas las cifras son de Reuters.
Las exportaciones de Rusia a países asiáticos que no participan de las sanciones son muy relevantes, desde Vietnam a Corea. India es uno de los grandes beneficiados de la compra de materias primas energéticas a Rusia con importantes descuentos.
India es uno de los grandes beneficiados de la compra de materias primas energéticas a Rusia
Rusia es el sexto mayor suministrador de carbón de la India, 1,8 millones de toneladas en 2021, según Reuters e Iman Resources. En petróleo y gas, India pesa mucho menos que China, importando 43.400 barriles al día de petróleo de Rusia en 2021 y un acuerdo de 20 años con Gazprom para comprar 2,5 millones de toneladas de gas natural licuado (GNL) al año, todo según Reuters y Platt’s.
Como en otras ocasiones, la Unión Europea debe medir con mucho detalle sus sanciones porque puede ocurrir que generen una severa crisis en nuestra economía y solo supongan un beneficio relativo para China que importará más y más barato para luego exportar a nuestros países.
No olvidemos que la Unión Europea no se puede permitir cortar totalmente las importaciones energéticas de Rusia. De los 150 bcm de gas natural que importa, solo se podría sustituir una parte y no olvidemos que en los próximos meses la disponibilidad de gas natural licuado (GNL) ocioso es casi inexistente.
Estados Unidos se puede permitir prohibir las importaciones de Rusia porque es independiente en gas natural y casi independiente, con México y Canadá, en petróleo. Reino Unido puede sustituir importaciones rusas con el mar del Norte y un portafolio de suministradores muy diversificado que ha usado en muchas ocasiones.
Es por ello por lo que la negociación actual entre Estados Unidos y la Unión Europea a la hora de diseñar sanciones adicionales debe incluir a China en el diálogo.
No existe el embargo energético a Rusia si China no se une. Para acabar con la invasión debe darse un compromiso firme en Occidente y Oriente para que Rusia no perpetúe su acción militar financiándola con exportaciones a Asia o Latinoamérica.