Artículo publicado en Diagonales, Argentina.
La pandemia del Covid-19 ha levado a la mayoría de los países a tomar medidas drásticas de cierre temporal de la economía. Las estimaciones de la economía mundial han cambiado de manera radical. A un shock de oferta en China se le ha añadido el cierre forzoso de la economía por decisión gubernamental y se puede añadir un grave shock de demanda que lleve al mundo a una crisis sin precedentes.
Las estimaciones son muy alarmantes. Estados Unidos podría caer un 4% en 2020 con un paro del 20%, China un 2% con un paro similar, la Unión Europea sería el área más afectada con una recesión y un desplome del PBI cercano al 8%, con España e Italia decreciendo a tasas de doble digito.
En Latinoamérica, las economías más afectadas serían México y Brasil. México ya sufrió un parón en la economía en 2019 y en 2020 se podría encaminar a la crisis más larga de su historia, según el Instituto de Nacional de estadística y Geografía (INEGI), con una caída de hasta un 4,5% del PBI. Al desplome de la actividad económica y el impacto de la pandemia se une el desplome del petróleo, con una caída del 54% anual. Ambos factores también afectan a Brasil, que caería hasta un 4%. En el caso de Chile o Colombia, la caída sería menor, cercana al 1-2%.
Para Argentina, la caída de exportaciones, del precio de la soja y las materias primas, además de la crisis en la que ya estaba inmersa el país, supondría una caída cercana al 3% del PBI, aunque la inflación mucho más alta que otros países (40%) y un paro también superior.
Las cifras son dramáticas, pero la mayoría de los análisis estiman que el crecimiento se recuperaría en 2021 de manera rápida. Las medidas acumuladas por bancos centrales y gobiernos están encaminadas a evitar una depresión económica por desaparición de liquidez y caída de empresas. En ese sentido, las grandes economías han lanzado programas nunca vistos de expansión cuantitativa y expansión fiscal centrada en préstamos a pequeñas y medianas empresas y ayuda a familias. Un despliegue que supera el 7% del PBI en algunos casos.
El gran riesgo para la recuperación es caer en el optimismo. Muchos países están actuando ante esta crisis como si fuera un problema menor, como si fuera un paréntesis, y no podemos olvidar las implicaciones a largo plazo si no se toman las medidas correctas.
Los países líderes en la gestión de la pandemia se han centrado en dos pilares fundamentales: Prevención, tests y control en la parte sanitaria, y preservar el tejido productivo y la solvencia del sistema económico en la parte que afecta a la economía.
Corea del Sur se sitúa como el país que mejor ha gestionado la pandemia, con 208 fallecidos a 10 de abril. Y no es por tener un alto gasto público. Corea del Sur tiene un gasto público de un 30% del PIB, un gasto sanitario per cápita muy inferior a la media de la OCDE y es uno de los países con mayor libertad económica del mundo. Singapur también destaca en la gestión de la pandemia.
Ambos países han tomado la decisión de controlar de manera estricta la pandemia, con tests y diagnostico rápido, y a la vez mantener el tejido productivo y el empleo.
Esta segunda parte es esencial para que no se convierta una crisis sanitaria en una depresión económica con implicaciones sociales mucho mayores a largo plazo. Mantener la inversión, proteger a las empresas durante el cierre forzoso y preservar al máximo el empleo son factores esenciales. También es clave mantener las cadenas de suministro fortalecidas y las reservas de moneda extranjera para evitar una cadena de impagos. No podemos olvidar que los países emergentes se enfrentan a más de $2 billones de vencimientos de deuda en moneda extranjera mientras las exportaciones se desploman y los precios de las materias primas caen.
Las organizaciones internacionales como el FMI y el Banco Mundial van a poner todos sus recursos para ayudar a los países, pero no va a poder darse una recuperación rápida si cada una de las naciones no pone esos dos pilares fundamentales como ejes de sus políticas en estos meses.
Los riesgos son claramente a la baja. Las estimaciones actuales asumen que el daño a la economía global será pequeño si el cierre forzoso por la pandemia dura poco tiempo. Sin embargo, cada mes de retraso en recuperar la actividad económica puede generar un 1% de caída del PIB global.
El gran peligro ante una crisis más prolongada es que el proteccionismo se implemente de manera generalizada y se tomen medidas equivocadas.
Una crisis global necesitará de una respuesta global y local
Por un lado, todas las economías del mundo necesitarán apoyo y cooperación mundial, pero a la vez políticas muy centradas en los diferentes aspectos diferenciales de cada nación, región y ciudad. No podemos pensar solo en un país o un sector. Si caemos en viejas y caducas políticas proteccionistas e intervencionistas, la economía mundial, y la de Latinoamérica con ella, se lanzarán a algo peor que una crisis de un año, a un periodo prolongado de estanflación. Argentina entra en esta crisis muy debilitada, con un alto riesgo país, altísima inflación, riesgo de impago y una economía que ya estaba en crisis. Es una buena oportunidad para implementar políticas de apertura y atracción de capital para que, cuando la respuesta de la ciencia sea efectiva -y lo será- el país pueda crecer de acuerdo con su potencial.
Esta crisis nos muestra que gracias a los mecanismos de mercado y financieros podremos salir rápidamente de la pandemia. Lo que debemos hacer es prepararnos para lo peor y trabajar para que no ocurra.
*Doctor en economía, profesor de Economía Global y autor de bestsellers entre los que se cuentan La Gran Trampa, La Madre de Todas las Batallas y Viaje a la Libertad Económica, traducidos al inglés, chino y portugués. Twitter: @dlacalle
Teniendo en cuenta a la depresión que nos puede llevar el COVID y viendo q su impacto en principio es mayor que el año 2009. No cree que el impacto en los mercados financieros de EEUU y Europa no refleja lo que se nos viene encima? Hay riesgo real de impacto negativo en las bolsas de otro 20% en lso proximos meses? Cree usted que el mercado asume una recuperación en V?
Buenos Días D. Daniel,
Según su artículo… Estados Unidos podría caer un 4% en 2020 con un paro del 20%.
En la anterior crisis del 2007, el paro máximo alcanzado fue en el periodo 2009/2010, próximo al 10%, y tan sólo se superaron esas cifras en la franja de menores de 25 años. Y en la crisis de 1929, el mayor dato encontrado fue en 1932, el 24% de la población activa estaba en paro. No cree que quizás, sus estimaciones son muy alarmantes ¿?
¿Qué necesidades de financiación tendrá la economía española en el 2020?. ¿Es verdad que hay que renovar deuda por 300.000 millones de €?. ¿Y que la caída del PIB junto con el déficit público pueden sumar alrededor de 200.000 millones de € adicionales?. ¿Esto es así?. ¿Estamos ante este calendario en relación con la deuda pública?. Gracias
¿Cómo puede afectar el alto nivel de deuda de los países europeos para poder aguantar esta crisis? El seguir aumentando la deuda podrá acentuar la crisis a medio plazo.
Les debilita mucho.