El presidente del Gobierno y la ministra de Trabajo siempre perjudican a los que fingen proteger. La precariedad ha hundido ya la jornada, pues las horas efectivas se hunden desde las 35,4 a la semana de 2018 a 31,7 ahora.
Yolanda Díaz ha celebrado el acuerdo para reducir la jornada laboral sin reducción de salario. Me parece fascinante que Gobierno y sindicatos, los que cobran, lleguen a un acuerdo sin los que pagan, los creadores de empleo. Y lo llaman social. No olvidemos que la ex cúpula de UGT Andalucía fue recientemente condenada por quedarse para el sindicato parte del dinero de las subvenciones de la Junta. La reducción de la jornada laboral es una medida cosmética, propagandística y contraproducente.
Seguir leyendo Sánchez, Díaz y la política más antisocial: el recorte de la jornada costará 11.800 millones a las empresas